¡ El recibimiento que no se olvida!

Tras una semanita larga de viaje y para seguir tradiciones , lo primero que hacemos no es venir a nuestra casa, no, lo primerito es ir a ver a nuestros niños.Mi temor es que se puedan olvidarse de nosotros pero por fortuna no se cumple y el recibimiento que nos hacen es algo maravilloso, te olvidas del cansancio propio de un viaje largo y solo quieres disfrutar esos momentos. La cara de Catuxa es de auténtica felicidad y nos da besos y abrazos que agradecemos muchísimo. Paulo nos sonrie y enseguida viene a nuestros brazos, creo que hoy lo he encontrado más guapo ( si cabe )con el pelo larguito y coloretes , sus ojos hablan por sí solos , son bellísimos.
Un beso muy grande para los dos y no cambieis mucho porque sois una "gozada".